Convivir para mejorar las competencias emocionales

El pasado mes de noviembre los alumnos del Ciclo de Grado Medio de Cuidados Auxiliares de Enfermería realizaron un stage emocional en la Granja Ability Training Center en Santa Maria de Palautordera.

Los alumnos y las tutoras de ambas clases del ciclo fuimos a convivir 3 días a una casa de colonias exclusiva para nuestros alumnos.

Nos encontramos todos juntos en la estación de Passeig de Gràcia del barrio del ensanche de Barcelona, donde tomamos el tren.

Todos sabemos de la importancia de las habilidades sociales y personales a la hora de trabajar en una organización, ya que actualmente se valoran estos aspectos de la misma forma que los conocimientos técnicos. Ejemplos de estas competencias son: el trabajo en equipo, el liderazgo, el emprendimiento personal, la creatividad, la gestión del conflicto y la frustración, la comunicación positiva o el autocontrol emocional, etc.

En la Granja trabajan con un método de educación emocional registrado, que entrena las competencias emocionales de los alumnos. Es decir, a partir de una actividad propuesta, como puede ser un reto, se logran objetivos concretos mediante actividades prácticas para entrenar a dominar las competencias personales y sociales, que les servirán para ser mejores profesionales en un futuro; la colaboración grupal, la emprendeduría individual, la inventiva, el abordaje de conflictos y situaciones complicadas, los desafíos, la comunicación constructiva y la autogestión emocional.

A continuación os explicamos algunas de las sesiones que se llevaron a cabo en este stage: primeramente, los alumnos realizaron una actividad de subir a un caballo, donde pudieron conectar consigo mismos, uno a uno pudo de un tiempo por estirarse encima, incluso, la profesora subió.

En otra actividad, los alumnos aprendieron a salir cogidos de las manos de un laberinto, todos los compañeros iban con los ojos tapados y sólo uno llevaba los ojos descubiertos, éste debía guiarles sin que en ningún momento pudieran separarse, de esta manera entrenaban el liderazgo y trabajo en equipo.

Además, otra de las actividades fue jugar en el minifútbol; el monitor dividió el grupo en dos equipos y cada equipo estaba atado en filas sujetadas por un palo horizontal (delanteros y defensas), el objetivo era marcar un gol, por tanto, se tenían que coordinar los movimientos a realizar a derecha e izquierda para hacer entrar la pelota en la red.

También tuvieron que pasar en grupo por una rueda sin tocar el suelo con un tiempo determinado y en otra actividad, se dejaron guiar por un circuito con los ojos tapados donde uno hacía de guía y el otro tenía que confiar plenamente en su compañero, el circuito tenía bastantes obstáculos y retos difíciles tanto para el alumno que debía hacer de orientador como por el alumno orientado. Asimismo, una de las actividades que más les entusiasmó más fue la de construir una cabaña juntos.

Todas estas actividades fueron llevadas a cabo con el acompañamiento de unos monitores muy bien preparados que gestionaron muy bien estas actividades y las concluyeron todas con coloquios muy enriquecedores para todas las estudiantes.

El alumnado gozó muchísimo de la experiencia, se abrieron a conocer a otros compañeros con los que no habían coincidido y conocieron mejor a sus compañeros de aula. Volvieron a casa contentos de las actividades llevadas a cabo e incluso comentaban que les hubiera gustado alargar la estancia unos días más. Volvieron tan animados que les gustaría repetir la experiencia en otra ocasión.